Darayus Sethna, Periodista por NordoniaHills.News
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El veintidós de febrero de 2004, los Houston Rockets estaban jugando contra los Atlanta Hawks. El partido se fue a tres horas extras, pero los Rockets sabían que ellos podían contar con el talento de Yao Ming. En cincuenta minutos de jugar, Ming anotó 41 puntos, un récord personal. Los Rockets ganaron el partido con un marcador final de 123-121. Yao Ming era sin duda el héroe de la noche.
Yao Ming nació el doce de septiembre de 1980 en Shanghai, China. Cuando era joven, sobresalió entre sus compañeros de clase, y empezó a competir en una academia de básquetbol. En 1997, Ming se unió los Shanghai Sharks en la Asociación China de Básquetbol. Debido a sus habilidades únicas e impresionantes, Ming participó con China en los Juegos Olímpicos de 2000 en Sydney. El equipo terminó en décimo lugar, pero el éxito apenas comenzaba por un Yao Ming joven.
En 2002, los Houston Rockets habían perdido a Hakeem Olajuwon y necesitaban a alguien para reemplazar su posición. Ellos tenían la primera elección, y decidieron escoger los talentos de Yao Ming. Con este honor, Ming se convirtió en la selección de draft más alta de una liga extranjera. Por el partido de All Star de 2003 en Atlanta, Ming fue el primer novato en la alineación titular en ocho años. Él también ayudó a Houston a llegar a los playoffs en 2004, 2005, 2007, 2008, y 2009. Después de la época de 2009, las heridas comenzaron a pasar factura a la carrera de Ming. Porque de los problemas con su tobillo, Ming se retiró en 2011. Sin embargo, su influencia para todos los inmigrantes es de gran impacto. Sin los esfuerzos de Ming, quien sabe donde estaría el básquetbol deportivo en China.